2.6.08

¿Alcohólica yo?, no creo, ¿o sí?

Todas sabemos sin recurrir a ninguna estadística que hay un mayor número de mujeres con problemas serios de alcohol desde edades mas tempranas. Del trago solitario y a escondidas del tiempo de nuestras abuelas , algunas mujeres han pasado a hacer funcionar la bebida como un elemento de mediación en las relaciones sociales. Algunas mujeres dicen el alcohol no me afecta aunque tengan que hacer varios viajes para acarrear botellas vacías hasta el contenedor de basura, su primera pregunta en la mañana sea ¿cuántas copas me tome anoche?, y recuerden de lo que prometía ser una noche romántica, que uno de los dos estaba vomitando y el otro medio desmayado o terminaron con una pelea encarnada porque el camarero tenia corbata y no moño –cero romántico–. Beber tiene sus misterios El alcohol en sus diferentes formas es la sustancia adictiva que mas se consume. Hoy es un problema que salio de las fronteras que lo tenían relegado al “sexo fuerte”, “los fines de semana” o “los mayores”. El alcohol salio para instalarse en nuestra sociedad: una cerveza a la mañana, una copa de vino a medio día, un gin tonic o vodka cola en la tarde…y así hasta terminar el día. Desgraciadamente en este tema parece que las mujeres se han propuesto alcanzar a los hombres. ¿Te preguntas si tiene esto algo que ver contigo? Si bebes, SI. «Existen varias formas de tener problemas con el alcohol , los relacionados a alteraciones de salud y por otro, la dependencia que genera un deseo intenso de beber sin control. Dos perfiles de bebedoras Las bebedoras habituales son las que superan la cantidad considerada de riesgo (más de dos o tres vasos de vino diarios), que al dejar de ingerir alcohol tienen síntomas de abstinencia, y que manifiestan problemas de tipo somático (hígado, páncreas, sistema nervioso…). Las esporádicas, cuando empiezan a beber no pueden parar y tienen borracheras . Si te identificas con uno de estos dos perfiles puedes empezar a plantearte que debes tomar medidas. «A las mujeres les cuesta mucho más reconocer que tienen un problema e integrarse en un tratamiento, y con frecuencia tratan de minimizar su consumo. Así es como se explica que desde que se toma conciencia del problema de salud o de comportamiento –normalmente a raíz de un episodio de consecuencias indeseables. Hombre vs. Mujer La diferencia fundamental de consumo entre sexos es que las mujeres tenemos una menor capacidad que los hombres de metabolizar el alcohol en el organismo. Eso significa que cantidades menores dan lugar a efectos mayores, además de producirse antes la dependencia. Esta enfermedad tiene cura, para lograrlo es necesario atacar desde varios frentes: la psicoterapia, orientada a la toma de conciencia del problema; el tratamiento de la dependencia, y la prevención de las recaídas. En la fase, de desintoxicación, se administran fármacos y vitaminas para prevenir la aparición de trastornos neurológicos. También se tratan los trastornos psiquiátricos añadidos, como la depresión, la fobia social, la bipolaridad. Por último llega la fase de rehabilitación, cuyo objetivo es que la persona pueda disfrutar de una vida sin alcohol. Lo puedo superar El grado de éxito suele ser alto siempre que la paciente se implique en su tratamiento. Éste no es un problema que se pueda resolver de modo involuntario o al azar, es fundamental que la persona tome conciencia y quiera curarse. La terapia psicológica trabaja para lograr esto. La medicina ayuda con los fármacos. La familia juega un papel fundamental pero, las comunidades de fe y lo que Dios hace a través de ellas encontrando en grupos pequeños, células o discipulados, contención, ayuda, cobertura de oración y compañerismo son cruciales. Las recaídas son frecuentes, pero es muy importante saber que éste es un problema que se puede llegar a superar», Conozco a alguien que puede liberarte de esa atadura, Aquel que dijo : Yo he venido para darte vida, y vida en abundancia. Me temo que una vida exultante pasa muy lejos de la botella que altera tu carácter , te deprime o vuelve agresiva , crea tensión en tus relaciones , paraliza parte de tu cerebro de forma que no estás en plenas facultades y te hace decir cosas que duelen. La persona que bebe suele decir : -¡Tengo muchos motivos para beber¡. Yo quiero decirte que ¡Tienes mas motivos para dejar de hacerlo¡.

No hay comentarios: